SUCIA PONCHERADA DE AGUA SUCIA
A los que
deambulan por las calles sin alma, cargados de dolor
Juan José Bocaranda E
Qué carga tan pesada
para mí,
a medida que la tarde
cede.
A medida que la noche
avanza,
mi corazón
deja de ser corazón
y va siendo una nuez.
Cuando voy por las calles
de la noche,
sin rumbo
y sin destino,
a la buena de Dios,
ya no me queda corazón,
el corazón ya no me alcanza.
Casi no vive el ave de mi pecho,
ya no la siento
a medida
que la noche se me viene
a la cara
como negra...